Helen Decatur había dedicado toda su vida a convertirse en una de las abogadas más respetadas de Carolina del Sur. Sin embargo, lograr ese objetivo no había sido nada comparado con el nuevo reto al que se enfrentaba.<
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceros, para mejorar su experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Más información