Crónica de una fascinación. Rebelde y polémico, apasionado revolucionario, Pasolini destaca en el siglo xx europeo por su conciencia crítica y una aguda inteligencia lírica. Su figura se alza majestuosa, igual que este libro de viajes, en un mundo -el actual- presidido por la indiferencia. En :El olor de la India la indagación antropológica y ética convive con la pasión por lo desconocido: por un lado, la belleza de los templos de Benarés, las noches de Bombay, las orillas del Ganges, todo el encanto de una tierra ajena e incomprensible; por el otro, el horror de la existencia que allí se lleva, que para Pasolini «tiene los caracteres de la insoportabilidad».