Hay críos de muchos tipos: de color de cirio, amarillentos, de color chocolate o de color de gamba cocida. Con forma de espárrago, de pelota de rugby o de armario. Pero todos ellos, todos, cuando se juntan, son una olla de grillos.
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceros, para mejorar su experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Más información